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lunes, 17 de febrero de 2014

A 15 AÑOS DE SU SECUESTRO

¡LIBERTAD Y LARGA VIDA PARA EL PRESIDENTE ÖCALAN!

El pueblo kurdo es un pueblo originario de la Mesopotamia, ha estado habitando durante miles de años las montañas y valles por donde bañan la tierra los ríos Tigris y Éufrates. En el reparto poscolonial de fronteras y la creación de estados-naciones, fueron postergados, olvidados y masacrados. Vivieron diferentes genocidios a lo largo de los últimos dos siglos.

Hoy conforman una población de 45 millones repartidos entre Irak, Irán, Siria y fundamentalmente Turquía, también encontramos más de 3 millones de kurdos que se encuentran exiliados o refugiados en Europa.

Durante la Guerra Fría, Turquía era frontera de la OTAN con la Unión Soviética, por lo cual las bases americanas, las desigualdades sociales y los golpes de estado estaban a la orden del día.

En las décadas del 70 y 80 vivieron 3 golpes de estado muy similares a los que asolaron Nuestra América, neoliberalismo con fusiles que se disponía a reprimir fuertemente a su pueblo.

En aquellos primeros días, en el 73, comenzó un muchacho de origen campesino, humilde, a vincularse a las universidades y al estudiantado patriótico y revolucionario, mas él reconocía que era kurdo, aunque era una historia silenciada, comenzó mediante asociaciones culturales y grupos de estudio a desarrollar el conocimiento entre los kurdos de su propia historia, a recuperar conscientemente la historia que les habían robado, la cultura que les negaban, la lengua que les prohibían, la libertad que deseaban.

Así fueron fusionando los elementos del marxismo y el comunismo a la cuestión nacional propia: a la cuestión kurda; y esto sumado a los golpes de estado fascistoides, los llevó a la conclusión de que la única manera de luchar eficazmente por sus libertades era establecer un partido revolucionario que organizara esa lucha.

Así, en el poblado de Fis, el 27 de Noviembre de 1978 una treintena de hombres y una compañera en su calidad de delegados fundaron el Partido de los Trabajadores de Kurdistán, fuertemente influenciados por el ejemplo heroico del pueblo vietnamita, y por las guerrillas suramericanas y la revolución cubana, no se alineaban ni a los soviéticos, ni a los chinos, ni al modelo de Albania, que eran las corrientes conocidas del marxismo en esos días.

Desde su nacimiento el Partido fue hostigado por las fuerzas armadas y el estado, aunque continuarían desarrollando una poderosa vinculación con las aldeas y pueblos campesinos, cada vez más se cerraban las posibilidades de tener una política pública sin una fuerte represión.

Así, los compañeros notaron la necesidad de combatir con las armas al régimen, y para ello comenzaron a entrenar compañeros en los campamentos del Frente Popular de Liberación Palestina, que el gobierno Sirio prestaba cobertura en la zona del Líbano ocupada por el ejército Sirio.

El 15 de Agosto de 1984 tres acciones militares conjuntas dieron publico nacimiento a las HPG (Fuerzas de Defensa del Pueblo), y comenzó a combinarse el trabajo político con el trabajo militar revolucionario y guerrillero.

La década del 80 y toda la década del noventa fueron de mucho trabajo y cruenta represión, el movimiento se desarrolló fuertemente hacia otras tierras, así comenzaron los trabajos políticos y militares en Irán, Irak y Siria. Desde un principio la militancia estuvo empapada de un espíritu internacionalista, en la guerra de Israel contra el Líbano en 1982, cayeron en combate unos 200 camaradas kurdos.

La lucha por la independencia y por un estado kurdo socialista se extendía por todo el corazón de Medio Oriente.

Durante los 90 el ejército de Turquía quemó, destruyó, inundó y masacró más de 4500 poblados, villas y aldeas, para acabar con la población campesina que daba su apoyo a la guerrilla. 5 millones de personas se desplazaron forzosamente o dejaron sus países y sus tierras. En los últimos 30 años el conflicto militar se llevó más de 40 mil vidas.

Desde 1993 que el líder Abdullá Öcalan insiste en lograr acuerdos de paz y treguas con un gobierno sediento de sangre y venganza que desconoce la existencia de los kurdos: prohíbe su lengua, sus canciones, su cultura.

El 15 de febrero de 1999, a quince años de el día de hoy, el compañero Öcalan fue secuestrado por fuerzas conjuntas de la inteligencia turca –MIT- Israelita –MOSSAD- y norteamericana –CÍA- en la embajada griega en Kenia, luego de estar haciendo gestiones para llegar a Sudáfrica, donde Mandela le había ofrecido asilo político.

El estado turco lo condenó a muerte, pero por la reacción de muchos países y de su propio pueblo, que en un solo día se incineraron vivos en protesta 60 personas, el gobierno tuvo que cambiar la condena por una cadena perpetua.

Öcalan, se encuentra desde entonces confinado solitariamente en una cárcel isla en el Mar de Mármara, la cárcel de Imrali, fue durante 10 años el único preso de toda la prisión de alta seguridad.

Bajo su guía y su conducción, el pueblo kurdo y el PKK comenzaron en los 90s y 2000’ a buscar otras opciones políticas de intervención. Fundaron casi una docena de partidos políticos legales para participar en las elecciones, los que uno tras otro fueron clausurados, ilegalizados, destruidos, con sus militantes encarcelados y asesinados.

Hoy día hay muchos intendentes, concejales, diputados y candidatos, y militantes en general, del Partido de la Paz y la Democracia y otros encarcelados por hablar en kurdo, por protestar contra el estado, por tener una ideología revolucionaria y actuar consecuentemente. Hoy son más de 12 mil los presos políticos kurdos en Turquía.

En los cuatro países donde están organizados como fuerza política viva, los revolucionarios kurdos se organizan y desarrollan la lucha armada revolucionaria, la lucha política electoral, e impulsan con un sin número de organizaciones auxiliares, sectoriales, gremiales y de masas, la lucha del pueblo por sus derechos.

Han evolucionado la propuesta leninista de organización a los tiempos actuales: El PKK no solo es la cabeza y la columna vertebral unida a todo un conjunto de organizaciones legales, semilegales, e ilegales, sino que han fundado la KCK -Unión de Comunidades de Kurdistán-, un SISTEMA POLÍTICO, organización ilegal, amplia y de masas, donde se encuentran integradas y contenidas todas las organizaciones auxiliares y funcionales a la lucha revolucionaria kurda.

Desde hace más de diez años que el Presidente Apo, como lo llama cariñosamente su pueblo, impulsó una revolución ideológica: ya no luchan por un Kurdistán independiente y separado, socialista y estatal. Han fusionado elementos de ecologismo y anarquismo al interior del marxismo revolucionario, aprendiendo de la experiencia frustrada de los soviéticos, y -teniendo en cuenta la estrategia imperialista de balcanizar y romper en mil pedazos los países de Medio Oriente- impulsan en cada país un proceso político de masas que permita el desarrollo del CONFEDERALISMO DEMOCRÁTICO, que implica que las etnias y religiones en Medio Oriente no tienen que servir de base para la división sino para la unidad, y que cada pueblo y religión tenga sus instancias de gobierno democrático, basadas en el gobierno popular en general y la pertenencia de los medios de producción al conjunto del pueblo. Propuesta que cada vez mas todos los pueblos de Medio Oriente ven con buenos ojos.

A su vez impulsan de manera tan consecuente la lucha por la liberación de la mujer (una nación oprimida dentro de una nación oprimida, dicen) que las mujeres tienen sus propios movimientos, sus propias organizaciones y sus propias guerrillas, incluso tienen su propia coordinadora guerrillera. En cada instancia de partido, de dirección, de elegibilidad, hay cupo de género, y además cada estructura tiene dos co-presidentes, una mujer y un hombre.

La lucha nacional, internacional, social, feminista, socialista y revolucionaria se encuentra en su conjunto amalgamada en la lucha del KCK y el PKK.

Sin el genio de Öcalan, difícilmente se hubiera desarrollado tan grandiosa organización, el papel del individuo en la historia, cumple en este caso un papel excepcional, siendo amado por todo su pueblo, luego de más de 15 años de cárcel, tortura, malos tratos, humillación, vejaciones e injusticias.

En el norte de Siria, Kurdistán occidental, que ellos llaman Rojavá, en medio de la guerra de estos dos últimos años, el 19 de Julio de 2012, declararon la Revolución Confederal, y salieron armadas las milicias kurdas a recuperar los pueblos que se tomaban entre si el gobierno y los rebeldes, Al Qaeda y otros jihadistas. Allí hoy en medio del conflicto militar más grande de la actualidad, más de 600 asambleas populares que ejercen su poder directo. Más de 150 aldeas, pueblos y ciudades están siendo gobernadas por una fuerza popular asamblearia, socialista, pacifista y revolucionaria.

Su propuesta es muy similar al socialismo comunitario que propone el hermano Evo, entroncado mediante el reconocimiento y organización de un Estado plurinacional.

Más de 50 mil milicianos y milicianas organizados en las Unidades de Defensa del Pueblo, y Unidades de Defensa de la Mujer (YPG e YPJ) garantizan el desarrollo militar de la revolución política, social, confederal y democrática de kurdos y otras etnias en el norte de Siria, contra Al Assad y el terrorismo pro yanqui de Al Qaeda.

A su vez en el inicio de 2013, Öcalan logró impulsar ciertas medidas unilaterales para la paz, retiraron algunos guerrilleros de Turquía, pero igual el estado evita avanzar en acuerdos de Paz, por eso cuando estaban por empezar las conversaciones asesinaron a las tres compañeras Fidan, Leyla y Sakine, en París, justamente no es solo simbolismo, que hayan asesinado a la compañera Sakine, única mujer que participó en la fundación del PKK que hace meses cumplió 35 años.

Hoy el gobierno insiste en mantener las pésimas condiciones de encerramiento del Presidente Öcalan, y las organizaciones revolucionarias kurdas han dado su compromiso a redoblar la lucha por la paz y por su liberación, que son casi un mismo proceso.

Elegir hoy la figura de un gran revolucionario como Öcalan para que guíe el espíritu de nuestra militancia es reconocer su trayectoria y su ejemplo de constructor incansable, de ejemplo de sus camaradas y de oído pegado siempre al pueblo, de decisión absoluta de luchar y de determinación a vencer. De elegir al representante del movimiento marxista revolucionario más poderoso de Medio Oriente para que inspire nuestras acciones, lucha y pensamiento por la paz y el socialismo. Por eso hoy hacemos un compromiso más en la lucha por su libertad y decimos:

¡Bijî Serok Apo! ¡Viva el Presidente Öcalan!

¡Libertad para Abdullá Öcalan y los miles de prisioneros y prisioneras políticas del régimen de Turquía!

¡Viva el internacionalismo y la unidad de los pueblos contra el imperialismo!

JUVENTUD GUEVARISTA DE ARGENTINA

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